Los tratamientos corporales se inspiran en cuidados para el rostro y nos prometen una piel linda. Sigue esta lección de belleza a cargo de la dermoesteticista Emmanuelle Foucaud.
¿Es posible? Un tratamiento para el cuerpo “chic saludable” tan eficaz como un tratamiento para el rostro. Ácido hialurónico, LHA, aceites fundamentales… Ahora nuestra leche o nuestro bálsamo protector también pueden uniformar, alisar, reafirmar y proteger nuestra piel, la verdadera guardiana del cuerpo.
Luego de la ducha, cuidados cotidianos
Al salir de la ducha o del baño, no secarse por completo y comenzar la aplicación de la leche o bálsamo corporal sobre la piel todavía un poco húmeda. Al igual que una esponja humedecida, nuestra piel absorberá mejor los activos hidratantes de nuestro tratamiento corporal. El resultado: un efecto prolongado a lo largo de todo el día.
Al cabo de un día muy agitado, un mimo al cuerpo con un tratamiento de noche
Como el rostro, el cuerpo también está sometido a diversas agresiones a lo largo de todo el día: roce de la ropa, viento, frío, sol, contaminación, sales de calcio… En la tranquilidad de nuestro cuarto de baño, nos entregamos a la dulzura y al confort de una generosa aplicación de bálsamo corporal, rico en agentes hidratantes y relajantes. El producto actuará sin perder su intensidad durante toda la noche. Al despertar: garantía de una piel suave.
Un tratamiento para el cuerpo con un efecto preventivo de la piel, antioxidante y antiedad
Un buen tratamiento corporal es la última barrera contra los efectos negativos a largo plazo del envejecimiento de nuestra piel (flacidez, pérdida de elasticidad). Tanto en forma de bálsamo como de leche corporal, enriquecido con ácido hialurónico, LHA y aceites nutritivos, se convierte en nuestro mejor aliado para prevenir los daños que el sol, el paso del tiempo o el cansancio infringen en nuestra piel.
En invierno o primavera, luego del verano, regalemos a nuestro cuerpo una cura intensiva de hidratación, para mantener su elasticidad y alisar su superficie. Después de las vacaciones, esto nos permitirá prolongar el bronceado.
Antes de una velada, un tratamiento corporal con serum resplandor
Para sentirnos bellas de pies a cabeza, nos envolvemos en una leche corporal que resalta nuestras piernas, nuestros brazos y nuestro escote. Para lograr un efecto “flash” inmediato, elegimos una fórmula a base de nácares que satinan la piel y la embellecen al reflejar la luz. Y para acentuar aún más el efecto, mezclamos un poco de aceite centelleante con nuestro bálsamo hidratante.
Después de una exfoliación o una depilación, aplicamos nuestro tratamiento corporal como una máscara relajante.
Para compensar los frotamientos inherentes a la exfoliación o el calentamiento que producen la depilación con cera o la depilación eléctrica, completamos nuestra sesión con la aplicación de una capa espesa de bálsamo untuoso. En solo unos minutos, la piel absorbe un máximo de activos hidratantes. Mimada, aliviada, luminosa, recupera su suavidad y un tono uniforme.