NUEVO  Información importante sobre los cookies de nuestro sitio web. Descubrir.  AQUÍ AHORA.

En caso de no hacer nada, se darán por aceptadas las cookies.

Cerrar

OK

OK Cancelar

Gracias

Cerrar

¿Qué puede hacer el agua dura en tu piel y cómo puedes protegerte?

Luego de la ducha, ¿tu piel se siente suave y fresca o la notas seca? El agua dura puede ser determinante en esa respuesta. Conoce más a continuación.


El agua dura es un tipo de agua compuesta de minerales y metales disueltos. Su acumulación se produce naturalmente cuando el agua pasa a través de la piedra caliza, el suelo y la arena, recogiendo minerales, a medida que se filtra en el suministro de agua subterránea.

¿Qué significa todo esto para tu piel? Aunque es seguro para beber y lavarse, puede acumularse en tu piel, haciéndola más vulnerable a problemas como:

Sequedad de la piel

El agua dura causa irritación de la piel porque hace que no disuelva adecuadamente los jabones, detergentes y otros productos de limpieza. De esta forma, quedan residuos de jabón en la piel, en el cabello, los platos y la ropa. En consecuencia la piel se vuelve seca, con comezón e irritada debido a la pérdida de humedad. La producción de sebo -lo que lubrica la piel- se altera y hasta dañar la capa de lípidos, provocando sequedad.

Condiciones especiales de la piel

El jabón que no se lava de manera correcta deja residuos en la piel, sumados a las células muerta y la suciedad no removido. Esto puede causar una acumulación y obstruir los poros, tal como ocurre con las tuberías. Esto ocurre cuando los aceites naturales que produce la piel quedan atrapados, lo que provoca la formación de granos, brotes y empeorar el acné.

Vivir en un área de agua dura también se asocia con un mayor riesgo de dermatitis atópica (o eczema). Cómo sabes si tienes agua dura? Algunos indicadores son: el jabón no espuma de manera convencional, la ropa y el cabello se sienten ásperos o si la presión del agua es baja.

¿Qué hacer?


1- Instala un ablandador o filtro de agua

La instalación de un ablandador de agua puede prevenir el desarrollo de sequedad y eccema en la piel. El agua blanda facilita la formación de espuma, lo que significa que el jabón funciona eficazmente y se lava fácilmente sin dejar residuos. Suavizar el agua es un paso útil para evitar la irritación y mejorar la calidad de la piel.

2- Dúchate correctamente

La temperatura y la duración del agua también son importantes. Evita las duchas calientes y prolongadas que pueden contribuir a problemas como el cabello seco y la piel. Además, no exfolies con demasiada frecuencia, ya que podría exacerbar aún más los efectos del agua dura.

3- Usa los productos adecuados

Elige un limpiador suave y correcto para tu tipo de piel. Un limpiador espumoso es ideal para la piel seca, especialmente uno que atrape las partículas de agua dura. No olvides hidratar la piel después de la ducha para contrarrestar los efectos ayuda a reparar la barrera de la piel, sellando la humedad y ayudándola a retener mejor la hidratación.

Recuerda que la vitamina C puede rejuvenecer la piel que se ve opaca, mientras que la vitamina A o el retinol se ocupan de las líneas finas y las arrugas que se notan cuando la piel se deshidrata.

Nuestro producto icónico

Best-seller

Agua Termal Mineralizante

Agua Termal Mineralizante

Best-seller

Concentrado fortificante de Agua mineralizante y Ácido hialurónico.

Concentrado fortificante de Agua mineralizante y Ácido hialurónico.

INNOVACIÓN: la dosis diaria de fuerza para tu piel

( 113 comentarios )

go to top
loading : 1,567 sec