Menopausia: ¿cómo puedo hidratar mi piel a los 50?

La hidratación es crucial para el bienestar de tu piel, sin importar la edad. Sin embargo, durante la menopausia, la sequedad es uno de los problemas más comunes y puede sentirse en todas las estaciones.

Dra. Karolina Kopeć

Dermatóloga

Cuidar tu piel durante la menopausia es la clave

Los desequilibrios hormonales durante la menopausia pueden empeorar la hidratación de tu piel. Las secreciones sebáceas también disminuyen con la edad. Si has notado piel apagada, áspera y más sensible, significa que debes modificar tu rutina de cuidado de la piel.
 

Te damos algunos consejos para hidratarte a diario:

1. Usa limpiadores suaves que protejan la función de la barrera cutánea dos veces al día e intenta evitar el agua caliente.

2. Hidrata tu rostro y cuerpo al menos dos veces al día.

3. Elige productos que contengan ingredientes que retengan agua, como el ácido hialurónico y la glicerina.

4. La piel escamosa y áspera necesita también exfoliación habitual, ya que es posible que no absorba los hidratantes que le aplicas. La clave está en eliminar las células muertas de la capa superior. Puedes hacerlo en casa o también puedes recurrir a un tratamiento profesional en consultorio, como peeling químico o microdermoabrasión. Tras una exfoliación, utiliza siempre un protector solar de amplio espectro. Consulta con tu dermatólogo cuál es el mejor tratamiento para ti.

5. Considera llevar un mejor estilo de vida. El tabaco, el alcohol y el bronceado excesivo sin protección solar empeoran el estado de tu piel y provocan sequedad.

6. Empieza a utilizar un spray facial hidratante o un spray de agua termal durante el día y evita los lugares donde el aire sea seco. Estas aguas pueden hacer mucho por tu piel, al mismo tiempo que la mantienen hidratada.

7. No olvides comer bien. Bebe una cantidad adecuada de agua para proporcionar suficiente hidratación a tu cuerpo. Intenta incluir productos ricos en agua y ácidos grasos omega 3 en tu dieta diaria.

Elementos clave que recordar:

La hidratación es imprescindible. Lo que más importa es el cómo.
Claves para una menor sequedad:
·      nada de perfume;
·      nada de agua caliente;
·      hidratación dos veces al día, como mínimo;
·      y un estilo de vida saludable.